¡Que viva la imperfección!

Mariela Michelena - el día de la madreHoy amanecí transgresora y creativa y he decidido sorprenderles con un post ¡sobre el Día de las Madres. Lo sé, en estas fechas estamos hartos de los anuncios, del «Si de verdad quieres a tu mamá cómprale este perfume, esta batidora o este par de zapatos», lo sé y, no obstante, no puedo sustraerme al impulso de hablar yo también de las mamás.

Hablaremos de lo que supone para una mujer posponer la maternidad.

Poder elegir el momento de ser madres, nos hace creer que en realidad existe ese momento perfecto, ideal, en el que nuestro hijo llegará como la guinda de un pastel que hemos preparado con ingredientes de esfuerzo, control y precisión: el padre perfecto, la carrera, el trabajo, la casa ¡y el coche! El reloj biológico aprieta con un tic-tac atronador. Nos asusta haber perdido el tren. Ponemos todo nuestro empeño hasta que ¡bingo!, ¡el Predictor nos da la buena noticia! Cuidamos la dieta, leemos libros, observamos los hijos de las amigas y hacemos la lista de los errores que nosotras NO vamos a cometer! Si hemos esperado tanto, si hemos dado con el momento perfecto, tendremos que dar la talla y ser las madres perfectas del bebé perfecto… ¡Horror!!!

Eso no funciona ni en los libros de ciencia ficción. La mejor madre ¡tiene que ser imperfecta! La mejor madre tiene que equivocarse un montón de veces hasta acertar y conocer al imperfecto (¡humano!) bebé que tiene entre los brazos, y prepararse para el próximo escollo.

Una mamá que se acepta imperfecta y reconoce lo inevitable de sus errores, será una mamá que acepte a su bebé tal cual es, y que no le exija lucir y brillar como una guinda en un pastel que al niño le resulta ajeno. Si te empeñas en tenerlo todo bajo control, al final del día estarás más cansada y más frustrada y habrás dejado a tu bebé solo en el mundo de las faltas y de las deficiencias.

¡No pasa nada! Bajar las expectativas y las exigencias te hará el camino más leve, ¡perdónate tu humanidad! ¡No pasa nada si estás cansada, si tienes sueño, si sientes que ya no puedes más! Seguirás queriendo a tu bebé, ¡y tu bebé te adorará, porque se sentirá acompañado y aceptado tal cual es!!!